Los relés termicos de Bilaminas son los aparatos mas utilizados para proteger los motores contra las sobrecargas débiles y prolongadas de ,manera indicrecta, es decir por calentamiento del motor a través de su consumo. Sus características mas habituales son:
- Tripolares. Motores trifásicos.
- Compensados. Insensibles a cambios de temperatura
- Rearme automático o manual.
- Visualización de la graduación en amperios.
Es un dispositivo de suma importancia para la protección del motor ya que, los fallos mas habituales son las sobrecargas, que se manifiestan a través de la corriente absorbida por el motor y de ciertos efectos térmicos. El calentamiento normal de un motor eléctrico con una temperatura ambiente de 40 grados depende del tipo de aislamiento que se utilice. Cada vez que se sobrepasa la temperatura límite de funcionamiento, los aislantes se desgastan prematuramente, acortando su vida útil. Por ejemplo cuando la temperatura de funcionamiento de un motor en régimen permanente sobrepasa en 10 grados la temperatura definida por el tipo de aislamiento, la vida útil del motor se reduce en un 50%.
Formado por dos laminas metálicas con diferente coeficiente de dilatación, que provocan la curvatura del mismo al ser atravesado por una corriente eléctrica y calentarse. Esta curvatura acciona un mecanismo de disparo cortando la alimentación eléctrica a la alimentación de la bobina del contactor.
Los relés llamados diferenciales disponen de un mecanismo capaz de detectar el fallo de una fase, por ausencia total de corriente y provocar el disparo del relé térmico. Para que este sistema diferencial funcione las otras dos fases deben presentar un consumo cercano al ajustado en el relé térmico.
Para la protección del motor será necesario combinarlo con los fusibles que protejan al motor contra cortocircuitos (Protección magnética)
Hay que tener en cuenta que si el motor se calienta presentando un consumo de corriente normal, por ejemplo por que se rompe el ventilador, el motor se calentará hasta quemarse el bobinado y ni el relé térmico, ni los fusibles saltarán debido a que el consumo sigue siendo normal. Se trata de un protección indirecta.
Para la protección del motor cuando esta se produce por causas ajenas al consumo del motor se instalan sensores en el bobinado del motor, resistencias no lineales.
Es importante ajustar el relé térmico al valor de la intensidad nominal del motor, este dato viene en la placa de características del motor. Si lo ajustamos a un valor superior el motor podría quemarse antes de que saltase la protección y si está por debajo de la intensidad nominal saltará continuamente.